La actividad se llevó a cabo en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de Tucumán. Allí estuvo Ariel Ogando, integrante de la Dirección de Capacitación y Promoción del organismo, para presentar el marco legal que da sustento al trabajo de la Defensoría del Público y las líneas de acción desarrolladas en pos de la protección y de la promoción de los derechos comunicacionales de las chicas y chicos.
El Congreso incluyó mesas magistrales que se refirieron a educación y nuevos desafíos comunicacionales; nuevas tecnologías y nuevas identidades; comunicación e intervención en organizaciones e instituciones; entre otras temáticas. Además, se realizaron talleres sobre periodismo deportivo, fotografía, radio, publicidad y comunicación alternativa.
Los festejos por los diez años de la Carrera de Comunicación en la Universidad Nacional de Tucumán fueron organizados por el Centro de Estudiantes de la Facultad de Filosofía y Letras (CUEFYL), la Secretaría de Políticas y Comunicación Institucional de la Universidad en trabajo conjunto con estudiantes y cátedras de la carrera.
“No todos somos iguales”, concluyen los y las jóvenes del Barrio ATE de San Miguel de Tucumán en la producción realizada en el marco del proceso de formación La Defensoría va al barrio. A lo largo de seis encuentros, los chicos y chicas reflexionaron sobre la estigmatización que padecen por vivir donde viven y el compromiso que deben asumir para revertir esta situación en los medios de comunicación.
Por eso valoraron la experiencia de ponerse en el lugar de productores, de poder mostrar otros aspectos de la vida en su barrio que no estén vinculados a la violencia y al delito. Ahora planean seguir produciendo cortos audiovisuales, sumando a otros chicos y chicas a expresarse y a ejercer su derecho a la comunicación.
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Podés ver los videos que grabaron chicos y chicas de otras provincias acá, para recorrer el país a través de la perspectiva de las y los jóvenes sobre sus propios barrios.
La Licenciatura en Comunicación de la Universidad Nacional de Quilmes y la Defensoría del Público llevaron adelante un curso extracurricular que tuvo como objetivo trabajar sobre los derechos comunicacionales de chicas, chicos y adolescentes. Materiales audiovisuales y radiales, experiencias educativas, recorridos sobre la legislación relacionada, funcionaron como puntos de partida para analizar y debatir qué establece la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual en relación a los derechos de chicos y chicas y cómo comunicar desde una mirada que respete esos derechos.
Estudiantes, comunicadores y educadores enriquecieron los encuentros con sus consultas y aportes. Los modos de construir la niñez desde la publicidad, las representaciones estigmatizantes, la formación ciudadana desde los medios y las posibilidades de producir formatos novedosos destinados a chicos y a chicas fueron los temas más presentes. "Hablar sobre representaciones me pareció un punto clave para pensar el derecho humano a la comunicación: rompiendo estereotipos es el modo en que podemos multiplicar las voces", sintetizó al final del recorrido una de las participantes. Otro de los asistentes puntualizó: "creo que es fundamental poner en debate el rol educativo de los medios en relación con la construcción de ciudadanía".
Los dos primeros encuentros se destinaron a presentar desde una perspectiva jurídica cuáles son los derechos que la Ley 26.522 y otras prevén en materia de comunicación para niñas, niños y adolescentes y a reflexionar acerca de los modos de representación sobre estos grupos que se construyen tanto socialmente como en los medios audiovisuales. En el tercer y el cuarto encuentro se desarrollaron herramientas para el abordaje de temáticas vinculadas con niñez y adolescencia en radio y televisión, y tuvo lugar un intercambio sobre experiencias de participación de chicos y de chicas en medios audiovisuales.
Coordinado por integrantes de la Dirección de Capacitación y Promoción del organismo, el curso también contó con la participación de miembros de las direcciones de Protección de Derechos y Asuntos Jurídicos, e Investigación, Análisis y Monitoreo de la Defensoría del Público. En el marco del Año por la inclusión de niñas, niños y adolescentes en los medios audiovisuales, esta iniciativa conjunta entre la Defensoría y la Universidad de Quilmes fortaleció la mirada de interesados e interesadas en producir y replicar experiencias que ubican a chicos y chicas como audiencias activas y productoras de sus propios sentidos.
Durante cuatro días se reunieron cerca de 300 jóvenes de Argentina, Brasil, Paraguay, Uruguay y Chile. El objetivo de las jornadas fue visibilizar las demandas y propuestas de la juventud rural, acordar una agenda de trabajo propia y sistematizar los aportes para la construcción de políticas públicas que fortalezcan la permanencia de las familias campesinas e indígenas en el campo.
Durante el encuentro, una comisión formada por representantes de organizaciones sociales debatió acerca de la dimensión comunicativa de las prácticas, el ejercicio del derecho a la comunicación en los espacios rurales y las propuestas de los medios en relación a las comunidades campesinas e indígenas. El espacio contó con la coordinación de Paula Castello, Sebastián Janeiro y Luciano Debanne, en representación de la Dirección de Capacitación y Promoción de la Defensoría del Público.
En el debate, Margarita Gómez, referente del Movimiento Campesino de Santiago del Estero - Vía Campesina (MOCASE-VC) y del Movimiento Nacional Campesino Indígena (MNCI), resumió: "La comunicación es una de las bases donde tenemos que hacer hincapié porque es un espacio donde se muestra cómo vivimos. Poder comunicar pero también que la gente nos cuente. Eso no pasa en los grandes medios pero sí pasa en nuestras comunidades, se da mucho el ida y vuelta".
Otro integrante del MNCI propuso reflexionar acerca de "qué rol puede tener cada uno de nosotros como comunicadores" y tras un trabajo grupal destacaron la importancia de que "el mensaje no vaya a quien está en la organización, que sea más masivo, que vaya a la sociedad, incluso a quienes ni siquiera visualizan a estas organizaciones. Hay que ser capaces de leer y analizar otros discursos y crear el propio."
En la puesta en común se dijo que "los grandes medios no dan las discusiones que hoy tenemos que dar", que "hablan del campo como si sólo fuera el agronegocio". Sobre este punto otros sumaron que "en 2008 salimos las organizaciones pero no se mostró al 'otro' campo" y en la misma línea de análisis agregaron: "la ciudad y el campo parecen dos realidades diferentes porque así lo muestran los medios. Que empiece la ciudad a apropiarse del campo y el campo de la ciudad". Reclamaron "que se muestre de dónde salen nuestros productos" y la importancia de "instalar nuestra agenda en los medios masivos para que muestren la otra realidad". "Que todos tengan el mismo derecho a dar información" y "romper el monopolio y que haya más diversidad", son dos ideas que sintetizaron desde ACINA Santa Fe. Y reafirmaron que "una de las herramientas más potentes que tenemos es la Ley de Medios".
Estos intercambios sobre comunicación se inscribieron en una serie de discusiones y definiciones sobre la realidad de la agricultura familiar en nuestro país y en la región, vinculada además a la Reunión Especializada de Agricultura Familiar del MERCOSUR (REAF), un espacio de encuentro entre productores familiares, organizaciones e instituciones rurales de la región que funciona desde 2004 con el objetivo de generar un marco de políticas públicas regionales para la agricultura familiar.
La Defensoría del Público apoya y acompaña este encuentro en el que prevaleció el debate sobre las realidades, propuestas y demandas de los jóvenes de la agricultura familiar campesina indígena. El acceso a la tierra, la Ley de Agricultura Familiar, la agroecología y la soberanía alimentaria, el fomento a la producción y la comercialización de productos campesinos, la equidad de género, la educación rural y el derecho a la comunicación fueron los ejes del encuentro.
El Centro Cultural Mate Cocido es un espacio de referencia para niños, niñas y adolescentes del Barrio ATE, ubicado en la periferia de San Miguel de Tucumán. Allí, chicos y chicas se reúnen para participar de la radio y de talleres de teatro y de música. En ese marco, la Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual llevó adelante una propuesta de formación para que los chicos y chicas conozcan y ejerzan sus derechos comunicacionales, como audiencias críticas y como potenciales productores. Durante seis encuentros, diez jóvenes de entre 15 y 25 años se encontraron para formar parte de estos talleres con el objetivo de analizar los modos en que los medios audiovisuales representan a la juventud y a la vida en sus barrios, conocer sus derechos comunicacionales y para producir un material audiovisual que muestre su barrio desde su propia perspectiva.
Durante los encuentros, los chicos y chicas reflexionaron acerca de cómo los representan los medios audiovisuales. Dijeron que “siempre que aparece el barrio es cuando roban o hay bardo, eso es lo único que aparece”. Además, compartieron lo trabajado con otros chicos y chicas que participan del centro cultural y también a través del programa de radio “Sin batuta”, realizado por la organización Mate Cocido.
El evaluar el proceso, Sonia García, docente y facilitadora del taller, sintetizó que fue un recorrido y un resultado altamente positivo. Los jóvenes del Barrio ATE manifestaron la voluntad de continuar estos encuentro para seguir produciendo otros cortos, con temáticas similares.