La Defensoría del Público y la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Buenos Aires renovaron el compromiso de llevar adelante el Programa de Actualización en Comunicación, Géneros y Sexualidades que implementará la casa de estudios durante 2015.
Con el objetivo de promover la segunda cohorte del Programa de Actualización en Comunicación, Géneros y Sexualidades, la Defensora del Público, Lic. Cynthia Ottaviano y el Decano de la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA, Glenn Postolski, firmaron un convenio de cooperación institucional.
Ottaviano destacó la importancia de abrir más espacios de formación para promover el debate y la profundización de las temáticas de género. “Es muy interesante poder canalizar estas cuestiones porque no hay muchos espacios más y es un reclamo que se hace permanentemente desde todos los sectores”, puntualizó
Por su parte, Postolski celebró que el programa de especialización se renueve este año y afirmó: “Este segundo ciclo aventura formar gente comprometida, que ha abordado el tema desde aristas tan interesantes. Va a ser un enriquecimiento para todos, para la Facultad, para la Defensoría y para el ejercicio profesional de la prensa”.
El programa fue concebido como instancia de formación, actualización profesional y desarrollo de competencias comunicacionales orientadas a la intervención pública a favor del derecho a una ciudadanía comunicacional, sexual y de género. En 2014 se desarrolló el primer ciclo donde participaron, de forma totalmente gratuita, 50 integrantes de organizaciones y agrupaciones de la sociedad civil, docentes, estudiantes avanzados y graduados de comunicación y personas que trabajan en los medios.
La Defensoría del Público en su calidad de jurado, participó del lanzamiento del I Concurso de Periodismo Multimedia “Trata de Personas y Explotación Sexual: Otras Miradas”, organizado por el Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la Nación. “Necesitamos nuevas miradas que se alejen de los caminos estigmatizantes”, sostuvo la Defensora del Público, Lic. Cynthia Ottaviano.
“La educación crítica de nuestras audiencias, es muy importante para que la mujer deje de ser vista como objeto de posesión y de dominio. Debemos construir un camino que deje de tener como eje la palabra exclusión, porque no hay una sola forma de ser mujer.”, aseguró Ottaviano, que forma parte del jurado del concurso.
En la apertura de la jornada, la subsecretaria de Acceso a la Justicia, María Florencia Carignano, afirmó: “Estamos muy contentos de poder realizar un concurso tan innovador y de promover este tipo de actividades para que periodistas, docentes y estudiantes se puedan formar en una temática tan compleja. Necesitamos que toda la sociedad se involucre en la detección de un caso de trata”.
Junto a Ottaviano, participaron del panel la coordinadora de la Asociación de Lucha por la Identidad Travesti y Transexual (ALITT), Lohana Berkins; la socióloga e investigadora del Instituto Gino Germani, Silvia Chejter; la directora del Observatorio de la Discriminación en Radio y Televisión, Myriam Pelazas y la periodista de la agencia de noticias TELAM, Silvia Molina, quienes también integran el jurado del concurso.
El cierre de la actividad estuvo a cargo de la coordinadora de la Oficina de Monitoreo de Publicación de Avisos de Oferta y Comercio Sexual, Chantal Stevens y del subdirector de Infojus Noticias, Martín Ale. “Es importante que desde el Estado se promuevan este tipo de iniciativas, en conjunto con las universidades y las organizaciones de la sociedad civil. Tenemos que operar en el terreno de lo simbólico y empezar a cambiar prácticas culturales”, concluyó Stevens.
El concurso es una iniciativa de la Oficina de Monitoreo de Publicación de Avisos de Oferta de Comercio Sexual en conjunto con el portal Infojus Noticias y tiene como objetivo promover el debate y el abordaje comunicacional sobre la explotación sexual y la trata de personas desde una perspectiva de género y derechos humanos.
El jueves 26, con la proyección a sala llena de Betibú, concluyó el programa que la Defensoría del Público, INCAA TV y el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) organizaron durante los jueves de febrero. Se vieron y debatieron tres documentales y una ficción de producción nacional que reflejan la problemática comunicacional, el papel de los medios de comunicación audiovisuales y la responsabilidad que los diferentes actores de la comunicación tienen en la construcción de sentido.
La trama de Betibú (2014), el último trabajo exhibido, gira en torno a un asesinato, una investigación periodística y a los intentos de un grupo poderoso de manejar o tergiversar la información de los hechos; un paralelo evidente a situaciones que la Argentina atraviesa en la actualidad, cosa que hizo que las audiencias respondieran en forma muy participativa en el debate junto al director y guionista de la película, Miguel Cohan y a la coguionista, Ana Cohan.
“Hay algo que a nosotros siempre nos interesó y tiene que ver con el tratamiento de las noticias. Siempre las comentamos y lo hacemos con bastante entusiasmo y tiene que ver básicamente con esto; no con lo que se informa, sino con el tratamiento de esa información, cómo se cuenta, para qué se cuenta, desde dónde se cuenta”, aseguró el director mientras su hermana, Ana, asentía entusiasmada. Luego, Miguel agregó: “Me parece que hay una cosa súper interesante que pasó en los últimos años y es que permanentemente hablamos tanto de la noticia como de qué manera se cuenta y eso me parece fundamental”.
Ante la pregunta que realizó una joven que participó de la proyección y el debate en el auditorio de la Defensoría: “¿Cual es la visión que tienen con respecto al rol de los medios de comunicación y los periodistas en relación a los poderes ocultos?”; el director respondió: “Creo que hay una diferencia entre lo que son los medios y los periodistas. El periodista también es un trabajador. Los medios tienen una agenda, tienen un lineamiento, una intención con cada noticia y una línea editorial; los periodistas son trabajadores. Creo que los medios de comunicación son como muchos poderes establecidos en nuestra sociedad y en todas las sociedades”.
“Hay poderes que son bastante intocables, los que siempre van a terminar afectados de alguna manera son los individuos y ellos van a seguir por arriba, por eso se necesitan procesos históricos para que declinen, nunca es de un día para otro, nunca es por un hecho”, respondió el director a otra pregunta de las audiencias.
Luego de las cuatro proyecciones en las que participaron alrededor de 200 personas se llevaron a cabo debates con quienes crearon las piezas, así, el 5 fue el turno de “La cocina. En el medio hay una ley”; con el posterior debate junto a su director, David Blaustein. El 12, “Tinta Roja”, dirigido por Carmen Guarini quien conversó con las audiencias en la Defensoría sobre el trabajo en una redacción periodística. “Orquesta roja” se presentó el 19 y, su director, Nicolás Herzog, charló con quienes estuvieron presentes sobre cómo los medios audiovisuales pueden construir una noticia. Por último, el 26 se proyectó la ficción “Betibú”.
El ciclo tuvo como objetivo profundizar el debate sobre el papel que juegan los medios de comunicación en el tratamiento de distintos tipos de noticias y se enmarcó dentro de las acciones que la Defensoría lleva a cabo para promover el derecho a la comunicación y el empoderamiento ciudadano.
A partir de una serie de reclamos presentados por las audiencias de distintos programas de radio y televisión del país, en relación con dichos y comentarios ofensivos respecto de personas trans, la Defensoría del Público expresa su preocupación por la recurrente alusión discriminatoria y estigmatizante por identidad de género que realizan quienes trabajan en los servicios de comunicación audiovisual.
La Defensoría recuerda que, en el marco del paradigma de protección de los derechos humanos, la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual establece que la actividad que se desarrolla es de interés público, que implica responsabilidad social y requiere del respeto hacia todas las personas, sin distinción alguna, como integrantes de una sociedad democrática.
Dicho respeto incluye el cumplimiento de la Ley de Identidad de Género, que en su artículo 2 la define como “…la vivencia interna e individual del género tal como cada persona la siente, la cual puede corresponder o no con el sexo asignado al momento del nacimiento, incluyendo la vivencia personal del cuerpo (...) También incluye otras expresiones de género, como la vestimenta, el modo de hablar y los modales”.
Además, en su artículo 12 establece la obligación de “Trato Digno”, al considerar que todas las instituciones públicas y privadas, como todas las personas, incluidas las que trabajan en un medio de comunicación “deberán respetar la identidad de género adoptada por las personas”.
Los comentarios ofensivos y las burlas estigmatizantes respecto de las identidades de género no heteronormativas resultan lesivas tanto para quienes son objeto de ese trato discriminatorio como para las audiencias, toda vez que en cada oportunidad que se lesiona la dignidad de una persona o un colectivo, como el Lésbico, Gay, Travesti, Transexual, Transgénero, Bisexual, Intersexual, Queer (LGTTBIQ), se trasgrede, simultáneamente, el derecho de las audiencias al respeto y la promoción de la integración social, libre de discriminación y malos tratos.
Por todo ello, la Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual recomienda a licenciatarios, comunicadores y comunicadoras:
1- Interiorizarse sobre la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual 26.522 y la Ley de Identidad de Género 26.743, en particular sobre los alcances de las obligaciones de Trato Digno.
2- Convocar como fuentes a las organizaciones civiles de colectivos LGTTBIQ para visibilizar su voz y experiencia sobre las prácticas discriminatorias a través de los servicios de comunicación audiovisual.
3- Promover una reflexión crítica y educativa respecto de los temas relacionados con la identidad de género.
4- Asumir el rol central en la construcción de una sociedad plural, igualitaria y respetuosa de la diversidad, evitando el uso de las identidades como formas de descrédito o como formas de negativización de sujetos sociales.
El respeto hacia las personas, independientemente de su identidad de género, es el pilar de toda democracia. Resulta fundamental que en los medios audiovisuales se reflejen las distintas formas de ver la vida y el mundo, evitando todo tipo de discriminación y estigmatización. Que asuman la oportunidad extraordinaria de tender puentes dialógicos, proponer representaciones inclusivas, de las diversas formas de ser y estar, alejándose de la ridiculización, la patologización y criminalización, más propias del siglo XVIII que del siglo XXI, en el que vivimos. Y que tanto daño causan.
La Defensoría del Público, INCAA TV y el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) invitan al ciclo “Comunicación y cine” que se desarrolla todos los jueves de febrero a las 18:30 en el auditorio de la Defensoría (Adolfo Alsina 1470, Ciudad Autónoma de Buenos Aires), con entrada libre y gratuita.
Durante febrero, se proyectan en la sede de la Defensoría del Público películas de ficción y documentales de producción nacional que reflejan la problemática comunicacional, el papel de los medios de comunicación audiovisuales y la responsabilidad de los diferentes actores de la comunicación. Luego de las proyecciones se realiza una charla debate con los realizadores.
El Jueves 5 se proyectó “La cocina. En el medio hay una ley” (2011), un documental dirigido por David Blaustein y Osvaldo Daicich. Relata la creación de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual y su aprobación en el Congreso de la Nación Argentina. El 12, “Tinta Roja” (1998), dirigido por Carmen Guarini y Marcelo Céspedes. Muestra la metáfora de una sociedad atravesada por fuertes corrientes de violencia que estallan diariamente desde las tapas de los diarios. No tiene por tema las noticias policiales, sino quienes las fabrican. El 19 “Orquesta roja” (2009), documental dirigido por Nicolás Herzog. Se sitúa en Concordia, Entre Ríos, donde dos importantes medios de comunicación transmiten en vivo y en directo cuando un grupo guerrillero se prepara para “entrar en guerra” contra el orden establecido.
El 26 se proyectará “Betibú” (2014), una película dirigida por Miguel Cohan y basada en la novela homónima de Claudia Piñeiro. Refleja la investigación y la cobertura periodística de un crimen cometido en un barrio privado.
El ciclo tiene como objetivo profundizar el debate sobre el papel que juegan los medios de comunicación en el tratamiento de distintos tipos de noticias y se enmarca dentro de las acciones que la Defensoría lleva a cabo para promover el derecho a la comunicación y el empoderamiento ciudadano.